Cada uno de nosotros iba acompañado de un guarda del parque en diferentes zonas para avistar a estos animales y contarlos, un trabajo duro que requiere caminar y sobre todo madrugar pues más madrugan ellos y luego ya no se los vuelve a ver. Una de las salidas fue en Sestrales y otra en el Valle de Pineta, en el primer punto se vieron muchos más tanto a la ida como a la vuelta mientras que en el otro punto fue solo al llegar pues desaparecieron rápido. Aunque estuvieron a punto de desaparecer los rebecos (o sarrios) aun corren por el pirineo aragonés.
Un festival multitudinario autorizado a orillas del embalse de la Cuerda
del Pozo con ilegalidades
-
En 2025 se va a celebrar un multitudinario festival musical y del motor a
orillas del Embalse de la Cuerda del Pozo (Vinuesa) que ya fue sancionado
en el...
Hace 3 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario