Aunque es uno de los símbolos de Madrid lo cierto es que eso de encontrar madroños enmedio del monte no es tarea fácil y menos del tamaño de éste. Entre que son arbolillos (arbutus significa árbol pequeño) y hay pocos, que lleguen a este tamaño tiene mérito. Como el madroño es de esos pocos que florecen en otoño, resulta todo un espectáculo ver cada de sus flores ocupada por un abejorro o por moscas cernidoras que encuentran aquí una de las escasas fuentes de néctar del otoño. En noviembre sus frutos están más que maduros y listos para consumir, pero solo uno...
Entregan unha carta aberta aos concellos afectados por proxectos de plantas
de biogás
-
Ecoloxistas en Acción, xunto coa Coordinadora Stop Gandería Industrial,
envía ás decenas de concellos galegos afectados por proxectos de plantas de
biogá...
Hace 3 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario