El retamar, el inmenso retamar que se extiende por toda la Sierra de San Cristóbal esconde sus cosas, está lleno de conejos y perdices y alberga poblaciones de camaleones. Pero no es lo único lo natural sino que también contiene el cementerio fenicio asociado al yacimiento del Poblado de Doña Blanca. Y además de eso en toda la sierra se encuentran unas 45 cuevas cantera. Encontrarlas no es complicado y localizarlas es localizar una gran higuera y rastrera que marca la entrada a la cueva.
La mayoría se encuentran muy deterioradas y salvo algunos casos la accesibilidad es complicada aunque en origen contaban con escaleras, ahora cubiertas por la tierra, que permitían fácilmente el acceso hasta su interior. Unas son más oscuras y otras más iluminadas gracias a los tragaluces que las iluminan. Todas las vallas de protección que impedían el acceso a las cuevas han desaparecido en los últimos años con el riesgo que conlleva en algunos casos. ¿Será en esta legislatura (2015-2019) cuando se saquen del olvido y se restauren algunas cuevas?.
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