Parece ser que cada vez se parecen más a las avispas o igual es que una vez visto como se disfrazan nos fijamos un poco más en estas peculiares moscas. Era un día nublado, muy húmedo y los pocos insectos voladores que había no estaban por la labor de volar y se quedaban todos así de paraditos y casi posando para la foto. Esta nos muestra unos detalles que no suelen mostrarnos otras moscas de este tipo, tiene amarillo en el tórax (como algunas especies de avispas) y sobre todo es que tiene las patas amarillas, como las avispas cuando la mayoría de las moscas cernidoras más habituales las tienen negras.
1 comentario:
Curioso. Como yo no se de insectos siempre había pensado que eran una especie diferente de avispa. Un abrazo.
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