Desgraciadamente en nuestro país las instalaciones energéticas no se hacen para dar cobertura a la zona sino para distribuirlas por todo el país, lo que implica importantes pérdidas en el transporte de la energía para llegar a zonas con gran demanda, que sorprendentemente no invierten en estas (tampoco en otras) instalaciones energéticas. Así, Galicia exporta el 33,3% de la energía producida cuyo fin suelen ser zonas con gran población. En este escenario podríamos pensar que no son necesarias más instalaciones, pero no, Galicia se ha convertido en un lugar que produce, sufre y no recibe los beneficios de esta energía pero si sus impactos. En la imagen de la izquierda (Xermade) está previsto ubicar un parque eólico de manera que las casas quedarían insertas en un polígono industrial, un despropósito impensable en otros lugares de España.
En Cotobade más o menos lo mismo, se tramitan muchos pequeños parques para esquivar la legislación ambiental nacional, lo que constituye un fraude destrozando el mundo rural. El impacto pasisajístico es lo de menos, se hacen grandes pistas para llevar los aerogeneradores, se destroza el monte y el modo de vida de las aldeas, hay un alto impacto humano que no se valora y más en una comunidad saturada de aerogeneradores. Incluso se ha propuesto construir aerogeneradores para producir hidrógeno verde, cuando la idea del hidrógeno era producirlo con la energía sobrante en momentos de exceso de producción eléctrica. "Eolicos si, pero non así".
Es el turno de otros de apuntarse a la servidumbre eólica, hay que ser más solidario entre todos y cada uno asumir la responsabilidad de producción de recursos comunes, especialmente los grandes consumidores energéticos, de no hacerlo esto empezará a parecer un tipo extraño de colonialismo.
1 comentario:
The energy issue is certainly global. As in your case on this posting, so much of the "production" is selfish with little consideration of the people and places affected by its production.
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