Las flores de las ranuncúlaceas se prestan a tener formas peculiares que pueden parecerse a animales como es el caso del delphinium. Aunque normalmente estas semejanzas suelen requerir un ejercicio de imaginación que no siempre es compartido por todos. En este caso la semejanza se hace con un águila, aunque más concretamente con el pico al igual que se habla de la nariz aguileña. Es una especie habitual en el norte peninsular en bosques de tipo atlántico con una buena cantidad de humedad ambiental.
UNA VIBORERA MUTANTE EN LA SIERRA NORTE DE SEVILLA: "ECHIUM PLANTAGINEUM" Y
LA FASCIACIÓN
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Hola a todos!
Hoy vengo a enseñaros una viborera muy peculiar que me he encontrado esta
mañana dando un paseo por un sendero al lado de casa.
Lo cier...
Hace 3 horas
3 comentarios:
Una de mis flores favoritas, y difíciles de fotografiar también.
muy buen trabajo.
un saludo
gracias
un saludo
Aguilucho, aguilucho...
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