Aunque su aspecto es similar a los tajinastes canarios, una mirada a las flores nos llevará a la conclusión de que nada tiene que ver con estos últimos. La corona de rey es un excelente ejemplo de planta rupícola, que crece en cualquier hueco de piedras pudiendo crecer incluso en paredes verticales como vemos en la tercera imagen. Es una especie habitual del pirineo quar e aunque lo más habitual será verla colgando de una pared a veces crece en lugares más accesibles donde podemos disfrutar de esta especie sin ponernos en riesgo.
Florece en la primavera pirenaica, a finales de junio, y al igual que otras especies rupícolas de lugares con alta insolaión sus hojas son de un color glauco y cubiertas de pelo para protegerse de la desacación. Aunque existen otras especies de este género en los pirineos, de todas ellas, es esta sin duda la más llamativa y espectacular. Su nombre se debe a la roseta basal, cuya sinetría circular recuerda a una corona.
3 comentarios:
Hola Juanjo. Magnífica colección de imágenes nos presentas en estas últimas entradas. Buen trabajo y estupendo blog. Un abrazo desde Doña Mencía
Una planta espectacular, Juanjo. Las fotos son increibles. Te felicito.
Un saludo: Juan
Gracias por los comentarios, el viaje de ordesa ha sido increible, de ahi las imagenes.
salu2
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