viernes, junio 13, 2008

Playa de los alemanes

La playa de los alemanes se encuentra en Tarifa, junto a Atlanterra y Zahara de los atunes, además de estar lindando con la Sierra de la Plata que cae dentro del Parque Natural del Estrecho. Se la conoce por este nombre ya que muchos de los alemanes se vinieron aquí cuando cayó el nazismo bajo el amparo del dictador de entonces. Por aquellos años ni siquiera había carretera aquí por lo que durante años vivieron en un auténtico aislamiento del mundo. Así empezaron las primeras construcciones aquí que incialmente estaban más o menos integradas en el entorno, posteriormente la cosa siguió aumentando hasta tener lo que tenemos hoy, un paisaje que crea diversidad de opiniones en contra de los desarrollos de bloques y más bloques pegados al mar que suelen causar un rechazo general. Hay quien lo ve como un mal menor (siempre puede ser peor), hay que ve un cierto encanto y a quien le horroriza como por ejemplo me pasa a mí, ¿es que no se pueden mantener playas vírgenes? ¿todo tiene que estar urbanizado de algun modo?, no me gusta nada este urbanismo sin urbanidad, estas urbanizaciones alejadas del mundo para unos cuantos privilegiados que pueden pagar grandes sumas económicas. Para colmo el ayuntamiento de Tarifa ha iniciado la urbanización de media ladera justo en el límite con el Parque Natural para ampliar la urbanización, La Dirección General de Costas dice que ninguna edificación incumple la ley de costas, da igual que estén junto al acantilado o que hayan hecho el muro junto al mojón de costas, ese objeto que simboliza la gestión (o más bien no gestión) de este ente cuya función es proteger el litoral. Aun así siempre queda la opción de orientar la toalla hacia el mar y disfrutar del atlántico azul intenso que disfrutamos aquí, de sus aguas frías, de sus finas arenas, del rico acantilado y sobre todo de cuantos sueños pasen por nuestra cabeza mientras disfrutamos de todo esto, sueños que se llevarán las nubes, sueños que aunque nunca se hagan realidad nos harán pasar un buen rato...

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